Una comitiva de sindicalistas viajará el 16 de septiembre al Vaticano para una audiencia privada con el Pontífice
En otro encuentro que puede interpretarse como un gesto político, el papa Francisco recibirá el 16 de septiembre próximo a una comitiva de sindicalistas de la CGT que estará encabezada por Héctor Daer y Pablo Moyano. Los dirigentes le entregarán al pontífice un documento con sus preocupaciones por las consecuencuas del plan económico de Javier Milei y le expresarán sus deseos para que vuelva al país. El eje del escrito sería el crecimiento de la pobreza y la caída del empleo con la aspiración de que el Papa avale un eventual reclamo frente al Gobierno.
El Papa recibió la semana pasada al gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, uno de los opositores más duros al Presidente y aspirante a conducir el PJ a partir de noviembre. El mes próximo será el anfitrión de una numerosa comitiva sindical, en la que además de Daer y Moyano, serán número fijo Gerardo Martínez, Andrés Rodríguez, José Luis Lingeri y Maia Volcovinsky.
Este viaje al Vaticano podría retrasar el debate interno en la CGT sobre cómo continuar su vínculo con el Gobierno tras el rechazo de participar de la mesa de Diálogo Social junto con empresarios y jueces laborales. En ese ámbito, el secretario de Trabajo, Julio Cordero, bajo la supervisión del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, definen la letra chica de la reglamentación de la reforma laboral que se incluyó en la Ley Bases. Hay tres artículos que son objetados por los gremios. Uno es el que define la creación de la figura del trabajador independiente con hasta tres colaboradores autónomos a cargo; el segundo punto es el que establece la penalización de los bloqueos y tomas de empresas al considerarlos “grave injuria laboral”, lo que habilita a los empleadores a despedir con causa a quienes participen de ese tipo de protestas, y el último tiene que ver con nuevos obstáculos para que un trabajador monotributista pueda demostrar una relación laboral.
La fecha del encuentro con el Papa fue confirmada a LA NACION por un dirigente cegetista al tanto de la organización. El Papa partirá desde Roma hacia Yakarta, Indonesia, el 2 de septiembre, y cerrará su gira el 13 del mismo mes en Singapur. Si su estado de salud y la condición física lo permiten, tres días después recibirá a los sindicalistas alineados con el peronismo.
No es la primera vez que el Papa recibe a representantes del sindicalismo. El 12 de junio último se reunió en la Santa Sede con el secretario general de la Asociación Argentina de Aeronavegantes, Juan Pablo Brey. Se fotografiaron juntos con una bandera del gremio y otra de Aerolíneas Argentinas. La imagen llegó justo cuando el Senado de la Nación debatía la Ley Bases, en la que estaba prevista la privatización de la línea de bandera.
Ese mismo día, en otra audiencia, José Voytenco, el líder de los peones rurales de la Uatre, le hizo entrega de un ambicioso proyecto elaborado por sus equipos técnicos. Se trata de la iniciativa “Hambre Cero en Argentina” destinada a distribuir alimentos entre población en situación de vulnerabilidad en el país y que planteaba una coordinación entre la propia Iglesia, el Estado y los sindicatos.