Este lunes se realizaron las primeras demoliciones de puntos de venta de droga en la ciudad de Santa Fe. “Es atacar fuertemente la venta minorista en barrios y devolverles un poco de tranquilidad a los vecinos", dijo el ministro de Justicia y Seguridad.
Se llevaron adelante esta mañana los tres primeros derrumbes de puestos de venta de drogas en la ciudad de Santa Fe, en el marco de la Ley de Microtráfico. Los tres estaban en zona de calle Cochabamba, en la intersección con Iturraspe.
El ministro de Justicia y Seguridad de la provincia de Santa Fe, Pablo Cococcioni, fue quien brindó los pormenores en el lugar al momento de dialogar con los medios de prensa: “Hoy estamos cumplimentando las tres primeras medidas de inactivación coercitiva de puntos de venta de estupefacientes ordenadas por la Justicia a instancias del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe; estamos inactivando -mediante desmantelamiento y derrumbe- tres lugares que fueron señalados, indicados en audiencia como punto de venta de estupefacientes”, explicó.
El ministro afirmó que “hoy se da inicio puntualmente en la ciudad de Santa Fe, a una parte de la política de microtráfico que ha generado la provincia a partir de la Ley de Federalización que consiste en atacar fuertemente la venta minorista, la venta en barrios y poder así devolver un poco de tranquilidad a los vecinos que muchas veces no podían salir de sus casas porque alrededor de un punto de venta de droga en un barrio hay disparos de armas de fuego, hay gente, hay desorden urbano, hay desorden social”.
Cococcioni dejó en claro que “entendemos que más allá de lo que es la política de drogas como política sanitaria a nivel nacional, nosotros como Provincia tenemos que pensar también el impacto en la violencia territorial que desencadena la venta de drogas, así que esto es la anulación de este lugar como punto de venta”.
En toda la provincia
El funcionario contó que “esto es muy frecuente en distintos puntos, a lo largo y ancho de toda provincia, y le diría que ha ocurrido también la misma problemática en otras provincias; también hay intervenciones judiciales que por ahí resultan en detenciones o en imputaciones a las personas, pero muchas veces el que atiende un kiosco de drogas o es una persona fungible dentro de una organización que los maneja, con lo cual si uno de alguna manera desactiva el kiosco, uno detiene dos o tres personas y mañana hay cinco más ocupando ese lugar”, señaló.
“Se trata de bloquear de cualquier manera la posibilidad que, en el medio de un barrio y el medio de un vecindario, se instale esta lógica mafiosa que no deja a la gente vivir en paz”, aseveró.
Finalmente, Cococcioni informó a los vecinos que “ni siquiera hace falta formalizar la denuncia, con el mero anoticiamiento se toma con Fiscalía y las áreas de inteligencia; no vamos a exponer a los vecinos a declarar porque pensamos en preservar a quienes nos brindan información. Así que pueden comunicarse con la página web del Ministerio de la Acusación, ir a un Centro Territorial de Denuncias, a una comisaría o llamar al 911”, alentó.
En tanto, el fiscal Diego Vigo destacó “el trabajo interagencial en el que se ha priorizado el abordaje de determinados puntos de venta y se ha materializado de esta manera la recuperación del espacio público que tiene un efecto simbólico muy importante, entonces el vecino pueda recuperar cierta tranquilidad de pacificación social”.
Primeros derrumbes
La demolición de estos tres búnkeres de venta de drogas, situados en la misma zona capital provincial, se suman a los 20 derrumbados en Rosario y localidades cercanas, tras haber sido identificados y judicializados en el marco de la Ley de Microtráfico. Esos 20 eran puntos de venta ubicados en Tiro Suizo, Empalme Granero y La Tablada de Rosario; uno en Fray Luis Beltrán, uno en Villa Constitución y uno en Puerto General San Martín.