El allanamiento de la Policía de Investigaciones para detener a una mujer de 31 años se llevó adelante en la zona conocida como Villa Manuelita, en el extremo sudeste de Rosario. La banda del fundador de Los Monos es investigada por balaceras y extorsione
La Policía de Investigaciones (PDI) de la provincia de Santa Fe detuvo este miércoles a la última persona que permanecía prófuga en la causa que investiga a Máximo Ariel “Viejo” Cantero e integrantes de la banda narcocriminal Los Monos, por formar parte de una asociación ilícita acusada de hechos de balaceras y extorsiones a comercios, estaciones de servicios y establecimientos educativos en la ciudad de Rosario.
El “Viejo” Cantero cumplió dos condenas anteriores y actualmente permanece detenido en uno de los pabellones para presos de alto perfil en la Unidad Penitenciaria Nº 11 de Piñero. “Hay un Estado determinado en perseguir a la violencia y al crimen organizado. Los violentos la van a pasar cada vez peor”, enfatizó el gobernador Maximiliano Pullaro.
En un operativo realizado por agentes de la PDI en una casa de pasillo ubicada en Colectora Schmidl y Ayolas, en el extremo sudeste de Rosario, detuvieron a Marisol Celeste V., una mujer de 31 años que era intensamente buscada por la justicia desde que en abril de 2022 desarticularon a la banda del “Viejo” Cantero en más de una veintena de allanamientos.
La investigación y los procedimientos del caso están a cargo de los fiscales Valeria Haurigot y Franco Carbone, junto con la División de Capturas de la PDI. En un domicilio de la zona conocida como Villa Manuelita dieron con Marisol Celeste V., a quien le secuestraron dos teléfonos celulares y demás elementos de interés para la causa.
Tras la aprehensión de Marisol V., la cantidad de imputados como miembros de la asociación ilícita, cuyo liderazgo se le atribuye al fundador Los Monos, asciende a más de 40 personas. “La decisión del gobernador Pullaro y de todo el equipo es ir a fondo contra la delincuencia”, sintetizó el ministro de Justicia y Seguridad provincial, Pablo Cococcioni.