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Después de la última cumbre entre Milei y Mauricio Macri en Olivos, el jefe porteño y el ministro de Economía acercaron posiciones para avanzar con una transferencia consensuada de la administración de las 31 líneas
El gobierno nacional firmará este martes, a las 11, el acuerdo con la administración de la Ciudad de Buenos Aires para el traspaso de las 31 líneas de colectivo que forman parte del sistema de transporte exclusivamente en esta última jurisdicción.
El conflicto por la quita de subsidios a las líneas de colectivo que operan en la ciudad llevaba varias semanas y amenazaba incluso con la afectación del servicio.
Sin embargo, el diálogo entre ambas administraciones se agilizó en los últimos días y este martes se rubricará el entendimiento cuando se reúnan el presidente Javier Milei y el jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, en un encuentro que tendrá como sede la Casa Rosada. El alcalde porteño visitó la sede de Gobierno en varias ocasiones, pero ésta será la primera oportunidad en la que llegará para rubricar un acuerdo con el Ejecutivo Nacional.
Desde el gobierno porteño sostienen que “en principio Cuidad se haría cargo de la parte del subsidio que paga la Nación”, pero que antes necesitarán “tener la información de la estructura de costos sobre la cual se calculó el subsidio”. De esta forma, al menos por ahora, no aumentaría el valor del boleto que pagan los pasajeros.
“El Presidente recibirá en Casa Rosada al Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Jorge Macri”, publicó el vocero Manuel Adorni en su canal de WhatsApp en la tarde de este lunes, aunque no sin precisar los motivos del encuentro, que luego confirmaron fuentes de Casa Rosada.
El conflicto por el tema es de larga data, pero se agudizó a comienzos de agosto, cuando se anunció que desde septiembre Nación dejaría de subsidiar las líneas de colectivo que operan en CABA y el AMBA.
Las declaraciones del titular del área de Transporte, Franco Mogetta, ocurrieron en un momento de tensión por la falta de pago de los fondos coparticipables que recortó el expresidente Alberto Fernández en septiembre de 2020 y que se arrastra, con intervención de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, desde entonces. “El Estado nacional no va a poner un peso”, había adelantado Mogetta en su presentación por el tema.
En vísperas del acuerdo de este martes, Mogetta visitó este lunes por la tarde la Casa Rosada para confirmar los avances. Se espera que después de la firma los equipos de ambas jurisdicciones sigan trabajando activamente en una “transición ordenada”.
“La Ciudad de Buenos Aires es la única ciudad de la Argentina que no administra su transporte. Lo administra el Estado nacional, que solventamos todos los argentinos”, argumentó Mogetta el mes pasado, en diálogo con LN+.
Los avances son también el eco de la última conversación que mantuvieron el presidente Javier Milei y el jefe de Pro, Mauricio Macri, en la quinta de Olivos, para coordinar el accionar de sus espacios y recuperar la sintonía política en el Congreso. Milei y Macri llevan una serie de cinco encuentros en el último mes que comenzaron pocos días antes de que el exmandatario reaparezca públicamente a comienzos de agosto y deslizara críticas al entorno del mandatario. Pese a eso y una serie de reveses en el Parlamento, la relación entre ambos se mantuvo y repitieron lunes de cenas a solos en Olivos, donde fueron dialogando sobre distintos puntos de la política local. El último fue el martes pasado.
Ese entendimiento produjo un vuelco en las negociaciones por el traspaso del transporte de colectivos entre los representantes de la Casa Rosada y del Ejecutivo porteño, que habían protagonizado la tensa disputa por la decisión de Milei de ejecutar la quita de los subsidios nacionales que reciben las 31 líneas que circulan por el territorio porteño.
Después de que se desatara esa fuerte pulseada por el costo político de un eventual aumento de tarifas, con advertencias cruzadas y reproches públicos, Jorge Macri y Milei acercaron posiciones y se encaminan a sellar una tregua. Los interlocutores de ambos gobiernos pulen la letra chica de un acuerdo para que la Nación le transfiera al gobierno porteño las líneas de colectivos con las competencias para poder gestionar el sistema. Jorge Macri pide tener la potestad o la facultad para decidir el precio de la tarifa, modificar el recorrido de las líneas o dar de baja los permisos de circulación. Y rechaza una transferencia unilateral. El pacto es complejo, por lo que se cocina a fuego lento.
